En el marco del Proceso de Admisión 2022, muchos han sido los jóvenes que han tomado la decisión de matricularse en la Universidad del Alba. Entre las carreras predilectas de los estudiantes, las del área de la salud son algunas de las más solicitadas.

Cada estudiante tiene una historia singular que lo llevó a cruzar las puertas de la UDALBA.

Es el caso de Catalina Acevedo, nueva alumna de Medicina. De 24 años de edad, su vida ha estado marcada por los hospitales debido a un bajo recuento plaquetario. Cuando nació, estaba cubierta de moretones y el diagnóstico no era muy claro. Con el tiempo, su caso lo asumió el doctor Francisco Barriga, jefe de Hematología y Oncología Pediátrica de la Red UC Christus, quien es una de las persona que más la ha inspirado. En su infancia, Catalina además realizó una travesía por Estados Unidos, donde fue atendida desde los seis hasta los ocho años en el Shriners Hospital, centro médico infantil de Luisiana.

Motivada por su vivencia personal, Catalina decidió matricularse en Medicina de la Udalba para ser un aporte a la salud pública del país. “Mi nanita, que falleció en 2020, me llevó al sistema público a conocer lo que viven la mayoría de los chilenos. Me puse a conversar y explicarle a las personas qué enfermedad padecía, en palabras simples, no en terminología médica. Tengo la experiencia como paciente y amo con la vida el proceso del cuerpo humano”, expone.

“Elegí esta universidad porque es inclusiva y tiene todas las facilidades de acceso para estudiar Medicina. Toda mi vida he estado ligada a esta área, y creo que faltan muchas manos en la salud pública. Yo ya viví la etapa universitaria en otra casa de estudios, así que estoy bastante contenta con el recibimiento de esta universidad”, expresó, tras matricularse en el campus Santiago.

También recalcó la importancia que tuvieron sus padres. “El objetivo de ellos era que fuera autónoma. Hoy me manejo con 40 mil plaquetas aproximadamente, me ducho, me visto sola gracias al apoyo de ellos”, remarca.

Catalina será compañera de Layla Gomes, estudiante brasileña de 22 años que se matriculó este martes también para ingresar a Medicina. De hecho ambas se conocieron y fotografiaron juntas en el campus de Ejército 177.

Layla llegó a Chile en 2018. Si bien siempre tuvo el deseo de estudiar la carrera, la enfermedad de su madre y el gran esfuerzo de los doctores por ayudarla en su recuperación fue lo que despertó el interés en concretar su sueño. “Mi mamá tuvo preeclampsia -complicación por presión arterial alta durante el embarazo- en el nacimiento de mi hermana. Quedó en coma inducido por poco más de un mes. Cuando despertó, no recordaba a nadie, ni su propio nombre, entonces empezó el tratamiento que fue un éxito. Hoy ella está bien y ya recuerda todo gracias a los esfuerzos del equipo médico que la acompañó”, cuenta la joven.

Sobre su vida en Chile, plantea que “este es un país de más oportunidades y vine también porque tengo un novio chileno. Mi proceso de adaptación fue un poco difícil, pues estoy lejos de mi familia y amigos, pero me encanta el país y pretendo seguir acá”.

Sobre su decisión de elegir a la UDALBA, explica que “el método de admisión propio fue muy importante, pues se  valoró mi vocación y no solo una nota en la PDT. Me gusta también el factor de que la universidad entrega oportunidades e inclusión a personas que talvez no tendrían posibilidades en otras universidades”, agrega.

El área de la salud también sedujo a Davis Torres, quien se matriculó en primer año de Enfermería en el stand que tiene nuestra casa de estudios en la Feria de Postulación y Matrícula de la Educación Superior en la Estación Mapocho.

Davis terminó Cuarto Medio en 2019 e inmediatamente ingresó al mundo laboral. “En 2020, al inicio de la pandemia, entré a trabajar como auxiliar de servicio al Hospital El Carmen de Maipú. Primero estuve en Pacientes UCI y actualmente soy auxiliar de la Unidad de Pediatría”, dice.

Justamente la experiencia laboral en el Hospital El Carmen le permitió descubrir su vocación. “En el hospital vi el trabajo de las enfermeras y enfermeros y me encantó su labor, ahí supe que eso también era lo mío. Eso le agradezco a la Universidad del Alba, este apoyo a los alumnos que no llegan al puntaje que requiere la carrera que les gusta. Ese es mi caso, no obtuve el puntaje, pero la vocación está, entonces tener la oportunidad de estudiar Enfermería, tener la oportunidad de expresar esto que estoy contando a través de una carta de presentación y que te escuchen, es un gran respaldo para estudiantes como yo, que tenemos muchas ganas de poder aportar”, comenta.

Davis, quien vive en Pudahuel y egresó del Colegio San Sebastián, de Santiago Centro, tiene una postura sobre la Prueba de Transición (PDT): “No estoy a favor de ese sistema de ingreso a las universidades. Que se evalúe la vocación de una persona, de un estudiante, solo por una prueba, no me parece que sea lo más justo. Habemos muchos jóvenes que estamos enamorados de cierta carrera, en mi caso de Enfermería, y creo que eso es mucho más importante que la medición que hace la PDT”.